Dos cronistas panameños ante la guerra civil española: Octavio Méndez Pereira y «Leo Pardo»
Niall Binns (nbinns@filol.ucm.es) - España
El panel que proponemos está dentro del eje temático Lava: territorios en transformación, en la línea Proyectos y experiencias de recuperación y divulgación de historias de lucha. A través de cuatro ponencias se estudian aspectos concretos de las consecuencias que en el mundo intelectual, cultural y literario centroamericanos tuvo la guerra civil española. La República española y la propia guerra logró movilizar a la clase intelectual y política de los países centroamericanos de una forma extraordinaria en los años 30 y 40. A favor de la República o de los rebeldes franquistas hubo un posicionamiento general que llenó las páginas de opinión de la prensa del momento. Los casos específicos de Costa Rica, Guatemala, Panamá o Nicaragua estudiados nos ofrecen reacciones diversas a través de sus escritores, revistas, temas tratados o formas literarias. Configuran reacciones específicas y plantean un panorama general que influye largamente en la ideología política del continente en adelante, como se aprecia en la activa presencia que el exilio republicano español tuvo en algunos de los proyectos culturales de la Revolución guatemalteca de 1944-1954. Se trata de un panel coordinado, compuesto por algunos miembros del proyecto de investigación: El impacto de la Guerra Civil Española en la vida intelectual de Hispanoamérica.
«Esa mujer está dando a España luz»: la Pasionaria en la literatura costarricense de la guerra civil española
Carlos González Ruiz (carlgo28@ucm.es) - España
La Costa Rica de los años treinta gozaba de un panorama político e intelectual profundamente dividido. El gobierno de León Cortés, de simpatías fascistas, hacía lo posible para frenar el auge del nuevo Partido Comunista y la creciente generación de intelectuales izquierdistas agrupados en torno a publicaciones como Trabajo, Repertorio Americano y Liberación. En este contexto, la guerra civil española tuvo un trascendental impacto en las letras y política costarricenses. La solidaridad con el bando republicano de los sectores de la izquierda chocó con las inclinaciones pro-franquistas de la derecha y buena parte de la Iglesia Católica, quienes veían en el conflicto peninsular el posible futuro de una Costa Rica cada vez más polarizada. Así, la prensa se dividió a favor de uno u otro bando y se hizo eco de los sucesos al otro lado del Atlántico según sus propios intereses, dando especial relevancia a los protagonistas de la guerra. Una de las figuras más celebradas fue Dolores Ibárruri, «la Pasionaria», líder comunista y mito heroico en la retaguardia costarricense, donde fue ensalzada como el principal símbolo de la España republicana en el discurso de una izquierda avasallada por la censura y la represión. A través de una combinación de connotaciones maternales y bélicas, «la Pasionaria» se destacó como ejemplo para la nueva mujer costarricense, que comenzaba a adquirir un papel cada vez más central en la sociedad, y referente para las aspiraciones políticas de la izquierda local.
•El romance en la poesía guatemalteca sobre la guerra civil española: de Lorca a la poesía de compromiso
Matías Barchino (matias.barchino@uclm.es) - España
La gran repercusión mediática e ideológica en todo el planeta de la guerra civil española (1936-1939) fue especialmente intensa en las repúblicas hispanoamericanas, que renovaron una relación de hermandad que los procesos emancipatorios había resquebrajado. Se movilizaron de forma activa -con la participación efectiva de sus jóvenes como voluntarios en el conflicto- y con la acción intelectual y política a través de opiniones y obras literarias. La República de Guatemala en manos de Jorge Ubico en los años 30, al contrario que otros países, dio apoyo oficialmente a la sublevación franquista y acogió a los elementos de la Falange Española que integraban la influyente emigración española en el país. Al mismo tiempo algunos de sus intelectuales y poetas -muchas veces censurados o desde el exilio- defendieron a la República. Uno de los medios fue el uso del romance español que, con el modelo inicial del Romancero gitano de Federico García Lorca -que se convirtió en una de las primeras víctimas del franquismo y símbolo de la barbarie fascista- tuvo un gran desarrollo. El romance es un género poético de raíz medieval y arraigado fuertemente en el folklore nacional guatemalteco a través de los corridistas populares y también en la poesía regionalista de los años 30, que ante la situación también se dedica a la defensa de las caudas políticas en manos de escritores como Alberto Velázquez, Víctor Villagrán Amaya, Francisco Figueroa, Francisco Méndez o en las páginas de la revista falangista guatemalteca Amanecer, y que tiene continuación en generaciones posteriores en poetas como Otto Raúl González.